Nuestros lectores opinan sobre la novela "EL FRÁGIL ALETEO DE LA INOCENCIA"

El frágil aleteo de la inocencia, un título tan sutil como enigmático que da nombre a la segunda novela de  Rosa Castilla.

El despertar de Volvoreta es la primera parte de esta trilogía romántica y erótica a la que yo comparo con un volcán. En su primer libro se va fraguando una bonita relación llena de dudas y pasión, en este segundo la presión va aumentando, y me temo que en el tercero la cosa va a estallar de una manera que no quiero ni imaginar.

Después de estar más de cinco meses con una novela de esas que cuesta tanto leer y al final cuando cierras el libro piensas: …¿y tanto para esto?, necesitaba algo fresco, fácil de leer, que te enganche desde el primer momento; y Rosa lo ha logrado con su “Frágil Aleteo”.

Una semana he tardado en leerlo. Rápidamente te sientes identificada con Marian, su protagonista, deseas tener un Carlos en tu vida que te haga sentir de esa manera, y bueno qué decir de Alan Carson, la tentación personificada…

También quiero destacar la facilidad para identificar a cada personaje que va apareciendo sin necesidad de tener que andar haciendo memoria como pasa en otras novelas, y cómo no, la sutileza con la que describe las escenas más apasionadas.

En resumen Rosa Castilla, se me va a hacer muy largo este año esperando ese desenlace que tanto promete.

Enhorabuena y no dejes de soñar.

Gloria Valverde


Un libro muy esperado para mi para seguir con la historia de Marian y Carlos,  Carlos y Marian. Para mi gusto es un libro más lento que el otro,  pero teniendo en cuenta que Marian llega a sitio nuevo, creo que no lo hubiese escrito mejor para tener una tercera parte de infarto.  Me sigue encantando el estilo y la elegancia con el que escribe Rosa,  los detalles de cada lugar que me hacen meterme en ellos desde el primer momento,  con personajes cercanos, que terminas queriéndoles y hasta enamorándote de alguno... ganas de sumergirme de nuevo en esta historia que te engancha desde la primer hasta la última letra...

Beatriz Sánchez










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